Ojos, tentáculos y mandíbulas

Pasando la piscina con las criaturas blancas, hay una pared con una puerta. Abrimos la puerta, y hay un pasillo oscuro en el que, del otro lado se ve una luz que parece ser producida por un objeto grande. Avanzamos por el pasillo, y notamos que el objeto es una esfera gigante que flota en un sala grabada en piedra y de contornos angulosos, la esfera está envuelta de pilares metálicos.
 
Ágnes tira una piedra dentro de la sala, y una voz profunda pregunta quien la tiró. Ágnes trata de esquivar la pregunta, y la presencia la ataca mentalmente, tratando de leer su cabeza.
 
Ágnes pregunta si tienen que luchar, y la esfera, que brilla cada vez que "habla", le dice que hay que resolver la situación. No veo nada que parezca ayudar.
 

Ágnes

Ágnes tira una piedra a la esfera flotante.

"Tú, deja de tocarme la mente, capullo!"

— Ágnes

Intento golpear la esfera con una llave inglesa, pero parece que la atravieso. Leonela intenta también con el pico de su equipo de escalada, y al hacerlo la esfera dice, adolorida

"Esta no es la forma de resolver las cosas..."

La esfera envía un pulso de energía que nos golpea a todos, pero lo esquivamos o resistimos. Al reducirse la luz de la esfera, vemos que el gancho está agarrado a un objeto blanco. Ágnes intenta revisarla, pero le duele mucho la cabeza. Yo veo que el objeto parece ser una caracola. Leonela toma la cuerda y tira de la misma, se escucha un grito desgarrador diciendo "nooooo", y la caracola cae al suelo. Debajo, parece haber un agujero.
 
Todos comienzan a bajar por el agujero y me instan a bajar. Julián se cae encima mío. Debajo, hay una sala con jaulas, en las que se ven ojos y latiguillos, y una cacofonía de voces que claman "a mi, a mi, a mi, a mi". La claraboya por la que entramos comienza a cerrarse lentamente. Ágnes les pregunta a los seres que qué quieren. Ella oye, ordenadamente, que le dicen que tiene que liberar a aquellos que dicen la verdad. Al fondo hay un ser que tiene más ojos que los demás. "Esto os diré: él, el de las mandíbulas diría que digo la verdad". En la otra jaula, donde parece haber muchos más tentáculos "Hazme caso a mi, ¿Yo o el de las mandíbulas dice la verdad?". El de las mandíbulas dice "El de los ojos y el de los tentáculos son distintos, uno miente y el otro dice la verdad"
 
Luego de pensar por un largo rato, Julián encuentra una llave, yo me acerco a la jaula de tentáculos y le digo "Si le pregunto a Ojos y a Mandíbulas si esto es una silla, me responderán que esto es una silla?". Tentáculos me responde que ellos responderían cosas distintas.

Sabiendo que Ojos y Mandibulas deben decir o la verdad o la mentira ambos, entiendo que tentáculos miente. Le pregunto a Ojos qué deberíamos hacer para salir del lugar. Ojos nos responde que liberarlo nos ayudará. Se ilumina una pared llena de runas que no entendemos. Le abro la jaula y Ojos se escapa por una claraboya.

Enciendo una linterna y veo que el suelo ha cambiado. La luz se enciende y estamos en una sala similar a aquella en la que recibimos un masaje. Delante de nosotros hay una mesa muy larga y alta. Hay tres seres del lapso delante nuestro. Dos de la tribu del crecimiento, en el medio uno alto y lánguido de piel verduzca y orejas largas, similar a un duende, similar a Bondia.
 

"Veo que han tomado la desición incorrecta, pero bueno, han salido más o menos ilesos. He visto gente con menos talento conseguir más cosas"

— Lapsiano

"Te voy a tirar una piedra"

— Ágnes

"¿Por qué no se va un poquito a la mierda, señor?"

— Maalik

 
El lapsiano nos dice que deberíamos elegir otro trabajo, por ejemplo barrenderos, y que deberíamos estar seguros si queremos seguir como exploradores. Discutimos entre nosotros prestandole poca seriedad.

"Basta de insolencia" Dice el lapsiano "No permitiré que digan otra palabra a menos que sea..." Alguien entra a la sala, y dice trabajosamente "Magistrado...Han traido otro...". Los tres lapsianos salen corriendo con el recién llegado.
 
Revisamos los papeles y vemos que son formularios de admisión nuestors, que dicen que tenemos capacidad de resolver problemas, que adquirimos el objeto que debíamos conseguir, pero que fallamos la última prueba. Salimos de la sala y hemos regresado a la sala de recursos humanos, pero ignoramos a la recepcionista y salimos.

La gente se está preparando para salir a trabajar. Vemos a los cuatro lapsianos de antes llevando a una persona que tiene una bolsa tápandole la cabeza. Al sacarsela vemos que es un un hombre de unos 40 años, com barba y pelo castaño, ropa normal. Le pregunto como se llama, responde que se llama Andrés. El gnomo nos dice que no nos metamos, que es un criminal, y nos muestra una nota que dice "Andrés Manzaneda, doble homicidio y secuestro"
 
El gnomo nos empieza a decir que no tiene por qué explicarnos nada, que saben que es un homicida y que lo van a encerrar "con los demás" y que si nos metemos vamos a terminar presos con ellos.

Me meto en la sala de recursos humanos y le demando al hada que llame a Bondía. Ella llega y nos pregunta qué ha pasado, y le dice a Ágnes que es así y que no nos metamos. Antes que le pueda hablar aparece el gnomo y le manda a que nos reforme"
 
"Oye, es mi padre, y es una de las personas más poderosas de la ciudad. Como me cae no importa, no es inteligente molestarlo, sobre todo ahora en época de elecciones. Nosotros, cada tanto, recibimos... gente, con una bolsa en la cabeza y una nota indicando los crímenes, algunos confiesan. Los metemos en la carcel donde los tratamos en forma relativamente humana"

"ha! relativamente"

"Ok, piensa en la forma en la que piensan estas personas tan desconectadas de la realidad y sin empatía"

"Como tu padre?"

"Ha! Ok, buen punto. Pero no podemos dejarlos andar a sus anchas"

"A tu padre?"
 
Le seguimos discutiendo, Bondía nos insiste en que no nos debemos meter ya que ellos han tratando de averiguar de donde sale esta gente pero no han podido, y que tratar con políticos es lo peor.